Por Cotti Rimmelin
Nuestro último día en San Pedro queríamos aprovecharlo al máximo, asi que organizamos un recorrido en bicicleta. El lugar escogido como meta, era Catarpe.
Me gustaba la idea de andar en bicicleta, era toda una aventura. Pasamos por ríos donde teníamos dos opciones pasar: múy rápido y arriesgarnos o bien mojar nuestros pies. Recomiendo que vayan con short, polera y unas buenas zapatillas, ponganse mucho protector solar y estén dispuestos a mojarse y embarrarse.
Catarpe, es un lugar distinto. Te encuentras con ese cielo azul, esos cerros cafés, ríos y tamarugos. Una variedad de colores. Cerca de ahí está Pukara de Quitor, hay unas ruinas y la quebrada del diablo. No pude visitarlos porque no me alcanzó el tiempo.
Al llegar a San Pedro nos esperaba el tour al Valle de la Luna. Era el más esperado por nosotros, asi que buscamos rápidamente un lugar para almorzar y estar listo para nuestro próximo viaje.
Un gran dato es "los carritos", un lugar bien escondido al lado de las canchas de futbol de San Pedro. El almuerzo cuesta $1.700 pesos y es un plato bien grande, lo recomiendo totalmente, bueno , bonito y barato!.
Nos subimos al próximo bus con destino al Valle de la luna, contemplaba lugares tales como Valle de la muerte, tres Marías, un mirador y cuevas de sal.
Todo era maravilloso, donde miraras era un paisaje lindo. La mezcla de colores cafés con el azul era lo mejor. Fue uno de mis lugares favoritos. Estuvimos entre cuevas y cerros, en lo alto de un mirador y finalmente un Valle de la Luna. Este último, me dejó impactada.
Queda apróximadamete a media hora de San Pedro, pero no es muy recomendable ir en bicicleta, ya que el camino no es apto para ese medio de transporte, quizás en bus es mejor, aunque sinceramente de la forma que llegues a ese lugar lo disfrutarás igual.
DATO, tienes que ir con una gran botella de agua ya que caminas bastante, además debes ir con ropa liviana, me parece que unos jeans o short y polera están bien, muy importante con zapatillas y un cortavientos para el atardecer.
Hay ferias artesanales, donde venden chalecos bastante lindos y coloridos. También venden gorros de lanas y una variedad de aros y collares. Además hay tiendas rústicas, no me van a creer pero North Face y Rockford se hacen presente, por si alguna prenda para el frío se te olvido, ahí está el lugar indicado.
Ya saben, totalmente recomendable visitar este hermoso lugar. Un lugar mágico. Me encantó. La gente, el ambiente, nosé... Me faltó conocer la mitad pero juro que volveré!
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